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LETICIA SERVIN

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lunes, 15 de agosto de 2011

¿Cómo se logró la detención de La Mano con Ojos?

Desde que se identificó a esta célula, la PGJEM la definió como "un foco rojo"
 
14 de agosto 2011

EL UNIVERSAL EDOMEX
14 de agosto 2011
09:30
La detención del presunto líder de la organización criminal “La Mano con Ojos” fue posible a partir de seis meses de labores de inteligencia que realizó la Procuraduría General de Justicia del estado de México, en los cuales destaca el seguimiento que hicieron al uso de números de celulares en la organización criminal.

Desde febrero pasado, cuando la célula al mando de Óscar Oswaldo García Montoya, cobró notoriedad después de una balacera en Atizapán de Zaragoza, Alfredo Castillo Cervantes, procurador mexiquense, calificó a “La Mano con Ojos”, como un “foco rojo”.

En una entrevista que EL UNIVERSAL Edomex realizó entonces al titular de la PGJEM, éste señaló que la detención de “La Mano con Ojos” era el tema prioritario para el estado de México.
A partir de ese momento, la procuraduría emprendió una serie de acciones encaminadas a la captura de García Montoya.

A comienzos de mayo, la PGJEM asestó el que quizá fue el golpe más importante a la organización encabezada por a quien también se le conocía como “El Compayito” o “El Compayo”.

El 4 de mayo, la procuraduría detuvo a 16 policías y servidores públicos del municipio de Huixquilucan, un día después el procurador Castillo Cervantes daba a conocer que se les investigaba por estar vinculados con “La Mano con Ojos”.

El 23 de mayo, el titular de la PGJEM informó que 21 personas habrían sido trasladados al Penal de Barrientos, entre ellos, los 16 agentes municipales que formaban parte de la red de protección de García Montoya.

Su tarea consistía en que desde el Centro de Monitoreo C4 de Huixquilucan, los uniformados alertaban cada vez que patrullas de corporaciones ajenas a ellos, incursionaban en el municipio, lo que permitía que la organización criminal eludiera los operativos para su captura.

Los detenidos, entre los cuales también estaba el operador financiero de la banda y un taxista que brindaba apoyo en los secuestros, reconocieron que García Montoya pagaba sus servicios con droga, pues varios de ellos eran adictos.

Este hecho resultó clave para que “La Mano con Ojos” fuera detenido, pues al desarticular su red de protección, el procurador señaló que, incluso, este líder criminal podría mudarse de la entidad mexiquense.

Los celulares

Cuando la PGJEM realizó una serie de detenciones en Huixquilucan, gran parte del trabajo de inteligencia a partir del cual se pudo determinar el vínculo de los funcionarios con “La Mano con Ojos”, fue el cruce de llamadas de teléfonos celulares.

“Los análisis de las llamadas telefónicas, registros de comunicaciones electrónicas y seguimiento a mensajes publicados en distintas redes sociales que empleaban, han establecido que 16 elementos Comisaría General de Seguridad Pública del municipio de Huixquilucan, colaboraban con esta organización”, informó entonces la procuraduría mexiquense.

En esta ocasión, un número celular fue también determinante para que la PGJEM lograra detener a García Montoya.

La madrugada del jueves, cuando se realizó el operativo a partir del cual se detuvo a García Montoya, varios elementos ministeriales se movilizaron a Atizapán de Zaragoza, donde uno de los cinco números que habían sido monitoreados durante los últimos meses fue detectado por la PGJEM.

Dichos teléfonos pertenecían a los miembros más importantes de la banda; así que los agentes no sabían al momento de la movilización si éste era el número de García Montoya.

Castillo Cervantes narró cómo el día del operativo, los ministeriales ubicaron a un integrante de la banda en Atizapán, quien les da una ubicación en Tlalpan.

A partir de ahí la PGJEM detecta la señal de otro de los números identificados con la célula delictiva, y es entonces que identifica el lugar donde se ubicaba García Montoya.

Entrevista realizada con Alfredo Castillo, en febrero de 2011

Cae “La Mano con Ojos”, capo educado para matar

Elementos de la procuraduría mexiquense detuvieron a Óscar Osvaldo García Montoya, alias “El Compayito”, líder de la organización delictiva denominada “La Mano con Ojos”, uno de los sicarios más buscados de México, vinculado con al menos 600 ejecuciones. 

http://impreso.milenio.com/node/9007454

2011-08-12•M.P.

Prevén internarlo en un penal federal
Prevén internarlo en un penal federal Foto: Iván Carmona
 
Elementos de la procuraduría mexiquense detuvieron a Óscar Osvaldo García Montoya, alias “El Compayito”, líder de la organización delictiva denominada “La Mano con Ojos”, uno de los sicarios más buscados de México, vinculado con al menos 600 ejecuciones.

El detenido fue adiestrado para matar en Guatemala y participó en diversas corporaciones policiacas del país, desde la Marina, la Policía Ministerial de Baja California Sur y la policía municipal en su natal Sinaloa.

El procurador general de Justicia de la entidad, Alfredo Castillo Cervantes, dio a conocer que Osvaldo García, también conocido como Jesús Castro Serrano, se inició en el crimen organizado a través del cartel de los hermanos Beltrán Leyva en 2002, como sicario en Lázaro Cárdenas Michoacán donde peleaba en contra de “La Familia Michoacana”.

Luego fue escolta de Arturo Beltrán Leyva, alias “El Barbas”, así como de Edgar Valdés Villareal, alias “La Barbie” y jefe de seguridad de Gerardo Álvarez Vázquez, alias “El Indio”. Además, participó en el plagio de 24 personas que fueron asesinadas en La Marquesa en septiembre de 2009.
Después de esto creó su propia organización caracterizada por la extrema violencia que ejercía en contra de sus víctimas, a quienes decapitaba como signo característico.

La detención se llevó a cabo durante la madrugada del jueves en una casa de seguridad en la colonia Tlalpan, en el Distrito Federal. Durante su detención le encontraron un arma de nueve milímetros semi automática.

En primeras declaraciones reconoció haber participado personalmente en 300 ejecuciones y ordenar otras 300 a integrantes de distintas organizaciones del narcotráfico que hay en el país.

Desde su aparición en el Estado de México ha sido vinculado con el homicidio de 18 hombres y dos mujeres, desde noviembre de 2010 a la fecha, pero debido a su alto grado de peligrosidad y a que tiene una orden de aprehensión pendiente en la justicia federal será internado en un penal de máxima seguridad.

Con su detención evitaron que cometiera seis ejecuciones que tenía planeadas para este fin de semana en que asesinaría a seis integrantes de su organización que pretendían desertar. El plan era matarlos y videograbarlos para enviar el material a diversos medios de comunicación.
Los elementos que lo detuvieron pertenecen al grupo especial denominado G60 que creó la procuraduría para combatir los delitos de alto impacto como es el secuestro y la delincuencia organizada.